“Fíate sólo de tu propia experiencia”, me aconsejé hace mucho tiempo. Era el único sabio consejo que podía darme entonces. Y fue ahí cuando empezó todo…

31 de diciembre de 2011

Magia de comprender

Es tan bonita la humanidad. Me siento bien al pensar así, aunque sé que me queda mucho por aprender. 

Es Chopin quien me hace sentir así, pero sé que, la realidad es mi sentimiento. Creo que el mundo de los sentimientos es de lo más real que puedo sentir, porque se siente con esa verdad que solo el sentimiento nos puede dar.

Veo a la gente sonreír, ceder asientos, dejar pasar, y no veo hipocresía. ¿Por qué? A veces la veo. Pero ahora... Ahora veo bondad, humanidad, espíritu, HUMILDAD. Felicidad...

Y solo veo el mal como algo triste, desesperanza. No creo que sea necesario no drogarse. Porque estas emociones nunca habrían surgido. ¿Que es un sueño? ¿Y qué? ¿Que no lleva a ninguna parte? Pero no tenemos rumbo, ni sentido, más que el que le demos nosotros a la vida. Y mi sentido de la vida es este, una hermosa, eterna, y humana contradicción, la paradoja de lo que no se puede ver ni comprender.

Y si escribo, cuando escribo, es para mostrar eso, ese caos. En un estado de belleza ilusorio y real al mismo tiempo. Y ya no busco tanto el por qué, porque esto es la evolución del espíritu. Del mío, y del de los demás cuando los veo, paralelamente. No trato de hacerme comprender más que de mostrar que no comprendo, y que ese no comprender me hace sentir. Y sentir es lo más real que uno puede sentir.

Poesía gratuita, porque el poeta no tiene precio. No soy yo, sino el mundo que fluye a mi través. Veo la ciencia incapaz de comprender. Porque nadie puede. Y es esa la más bella comprendsión. Oh, rumbo, a dónde nos llevarás mañana?

Desde que dejé la lobotomización -por gracia-, me siento más vivo, y más loco por vivir. Este estado es la recompensa del sufrimiento por no ser comprendido ni poder comprender. Pero al menos sé, sé que no comprender es la mejor comprensión del mundo que se puede tener. Comprensión incomprendida, la más alta comprensión y el principio de todo conocimiento. Sé, sé que no sé, con lo cual empiezo a comprender.