“Fíate sólo de tu propia experiencia”, me aconsejé hace mucho tiempo. Era el único sabio consejo que podía darme entonces. Y fue ahí cuando empezó todo…

4 de mayo de 2012

Imperfecciones en las sombras de nuestros sueños

El sueño me persigue,
tanteándome,
como si estuviera después.

Sangro, lloro,
y Él es mi sombra.

El futuro ha muerto ya,
solo queda el tormentoso pasado de lo presente.
Donde tus mulas caminan a lo ancho,
donde las calles atardecen el ambiente.

Dos personas,
tú y yo.
Dos personas sentadas,
que se dicen adiós.
Porque su presente solo duró
tanto como desde que el silencio calló.

Y sigo soñando,
esperando el cambio.
Siendo paciente,
consciente.

¿Llegaré?
¿A dónde, si se puede saber?
Porque estar estoy (ciego),
y sentido no tengo.