como no está escrito.
Ahora comprendo,
y no lo puedo escribir.
Mas el amor es ilusión,
y me creó; me destruyó.
Aspiré a ser como tú querías que fuera,
y ahora aspiro ser otra cosa.
Es un rompecabezas extraño,
el del poder y la frustración…
Un rompecabezas perdido,
entre tanta loca función.
Sé que estás lejos.
Que hay cierta y dura distancia entre tú y yo.
Y eso me importa,
me importa más de lo que crees.
Pero hago parecer que no,
que todo me da igual.
Y me lo creo.
Y lo hago real.
Y lo termina siendo.
…Mas sé que no lo es,
porque detrás de todas estas palabras impuras se esconde una abrumadora pureza que a veces trato de hacerte ver.
La pureza dice que aún no es tarde para los reencuentros, para los momentos olvidados que deben ser recobrados…
…para aprender.
Aprender, crecer…
No logro destapar completamente la barrera que ahora nos separa,
pero es que el miedo sube,
a veces parece que no termina de subir.
Y es un miedo comprensible, pues yo, al menos, lo entiendo.
O quizá quiero entenderlo.
…para aprender.
Aprender, crecer…
No logro destapar completamente la barrera que ahora nos separa,
pero es que el miedo sube,
a veces parece que no termina de subir.
Y es un miedo comprensible, pues yo, al menos, lo entiendo.
O quizá quiero entenderlo.
El miedo me domina.
Pero al decir esto tengo valor.
Al hablar tengo valor.
Al escribir tengo cojones de plantarle cara a mi sombra.