Reflejo sincero de honda amargura.
Ignorancia.
Te dedico esto,
alma oscura.
Un día un viaje comenzó,
un viaje sin límites.
Verde como el amplio horizonte de sus ojos "amarillos".
Azules,
como el mar.
Que aún no sabía…
…dónde iba a parar.
No sé cuál es tu (ni su) color,
de una u otra forma;
pero siempre será cierto esto que te digo.
Mas creíste haber olvidado:
Detrás de los oscuros océanos que inundan tu inconsciencia,
detrás de los muros que ocultan las puertas de tu esencia;
se despliega hermosa y despiadada desnuda simplicidad,
en todos estos rostros que no terminas de amansar.
Sujeto de la pasión amable y febril,
que nunca tendré,
y quizá siempre me inspirarás.
Vacío…
Vacío para encontrar la plenitud que nunca querrás lograr.
Que no crees que merezca la pena,
y al mismo tiempo…,
…motivó tu despertar.
Despertar elemental,
soberbia descomunal.
Principio de inquietud,
nudo de des-coseidad.
Te encontraste,
te perdiste, (amaste),
te volviste a encontrar…
…para volver a perderte.
Y volver a despertar.
Quisiste jugar,
quisiste jugarme,
quisiste ver juego…,
…la PURA realidad.
[…]
Y ahora confieso todo lo que veo.
Todo lo que, por ahora, he podido ver,
Y recordar,
y en ti me hizo confiar.
Y por esto te dedico…
…este sincero final.
